Por Juan Tomás Valenzuela
Quien ya fue genio y figura
de un período tan atroz,
pone en las manos de Dios
su frugal candidatura.
Y es que en la actual coyuntura
que presenta el panorama,
la muy mal ganada fama
de este amo de los vientos,
podría ser impedimento
para alzarse con la lana.
El líder, mentor y guía
del partido de gobierno,
cree que en un proceso interno
podría lograr lo que ansía.
Lo único que impediría
el sueño de este león,
es que en una convención,
de una manera albitraria,
Danilo abra las primarias
irrespetando el padrón.
Cuando el Papa se enteró
de los deseos de Leonel,
le dijo: “Hey, mire a ver,
no se me meta con Dios”.
La otra vez que gobernó,
no fue Dios, fue Lucifer
quien se combinó con él
para traer el desastre,
“Y el penco tanque de lastre
que arrastra esta prefectura,
fue el maletín de facturas
que a este pueblo dejaste”.
24 diciembre 2017